Las galletas con chispas de chocolate son un clásico.
Es la combinación perfecta entre el sabor crocante y crujiente de una galleta y la suavidad y untuosidad del chocolate. Son prácticamente irresistibles y la gran favorita de las familias (además de las galletas Oreo).
Su elaboración es muy fácil.
Primero hay que saber que las galletas de mantequilla son la base para desarrollar todo tipo de recetas saborizadas y particulares y aunque exista una fórmula original hay muchas texturas y propuestas según la adición o sustracción de ingredientes.
También sucede que las galletas como los brownies tienen grandes fanáticos.
En el caso de estos últimos se debaten entre la versión húmeda y la esponjosa porción de torta. El sabor varía, pero la diferencia de texturas obedece a la proporción de harina y grasas que se coloca en la preparación.
En cuánto a las galletas también hay una ciencia. Para que queden más crocantes, o más suaves, o más regulares hay fórmulas casi vox populi. Un horno más caliente, más harina, los tipos de azúcar utilizados y la cantidad de mantequilla influyen el resultado final.
¿Aún no tienes tu propia receta? La única forma de encontrar una es practicando.
Receta de galletas caseras
En toda familia hay un libro de recetas o una abuela guardando celosamente los secretos heredados. Uno de ellos es la receta de galletas con chispas de chocolate.
La receta de galletas de chocolate chip que vamos a compartir a continuación tiene la particularidad que te permite elegir la cantidad de chispas de chocolate que le quieres añadir (bueno, eso lo puedes hacer en todas) y además el toque de sal marina que le aporta un contraste de sabor fenomenal.
Si eres de los que prefiere una galleta llena de pequeños trozos de chocolate derretidos puede usar mucho más de lo sugerido, o incluso prescindir de él si quieres algo más natural como las variaciones con avena, con nueces, entre otras.
El chocolate que le pongas también va a depender de tus gustos. Puede ser con leche, oscuro o como lo prefieras.
El tamaño puede ser variable. Puedes distribuir de manera uniforme cucharadas de mezcla en una bandeja con papel encerado (reservando un espacio entre cada una) pero las porciones serán al gusto y dependiendo de lo que tengas planeado hacer con tu camada de cookies. Puedes hacer súper galletas o mini galletitas.
¿Cómo hacer galletas?
Usar las manos nos es común en una receta de galletas, pero a veces vale. Las paletas de madera son el utensilio más usado para integrar elementos en una preparación. Elige la forma que prefieras.
Toma la mantequilla con el azúcar y revuelve hasta unirlas y luego añade huevos y vainilla.
En Latinoamérica es muy común el uso de leche en polvo en la cocina, así que no extraña que esta receta lleve un poco.
También le añadimos un poco de sal marina para potenciar el sabor del chocolate. Al final la harina, las chispas y al horno. Rápido, fácil y deliciosas galletas para merendar.
Receta de galletas con chispas de chocolate
Ingredientes
- 250 g De mantequilla sin sal (derretida) a temperatura
- 90 g De azúcar morena
- 60 g De azúcar granulada
- 1 Huevo
- 2 cucharaditas De extracto de vainilla
- 210 g De harina para todo uso
- 2 cucharadas De leche en polvo descremada
- 1 cucharadita de sal kosher
- 1/2 cucharadita de polvo de hornear
- 1/4 cucharadita de bicarbonato de sodio
- 350 g de chips de chocolate o trozos de chocolate (semi dulce oscuro o al gusto)
- 2 cdas de sal marina
Instrucciones
- Precalienta el horno a 180°C.
- Con una cuchara de madera (o con la mano limpia) mezcla los dos tipos de azúcar con la mantequilla derretida y mezcla vigorosamente durante un minuto más o menos. Agrega el huevo (previamente batido con la vainilla). y revuelva hasta que la mezcla tenga un ligero brillo.
- En este punto, agrega la harina cernida, la leche en polvo, la sal y los polvos (bicarbonato de socio y polvo para hornear).
- Deja las chispas de chocolate para agregar al final y combinar suavemente.
- Forma pequeñas bolas con ayuda de una cuchara (para controlar las porciones) y colócalas en una bandeja para hornear con papel encerado.
- Lleva al horno durante unos 10 minutos, o hasta que los bordes estén ligeramente dorados pero el medio aún esté suave. Cuando las galletas se enfríen ligeramente se deben transferir a una rejilla para dejar enfriar totalmente.
- Puedes disfrutarlas de inmediato con un vaso de leche fría o guardarlas en un recipiente hermético para una ocasión especial.
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